Page 11 - Revista 40 años UEES
P. 11

U
                                                                    UNIVERSIDAD EVANGÉLICA DE EL SALVADORNIVERSIDAD EVANGÉLICA DE EL SALVADOR
                 11 Pero ten cuidado  de  no olvidar al             olviden del Señor su Dios, que los sacó
               Señor tu Dios. No dejes de cumplir sus               de Egipto,  donde  eran esclavos; 15 que
               mandamientos, normas y preceptos que                 los hizo marchar por el grande y terrible
               yo te mando hoy. (NVI)                               desierto, lleno de serpientes venenosas y
                                                                    escorpiones, y donde no había agua. Pero
            Hoy más que nunca, cuando recién se puede               él sacó agua de una dura roca y les dio
            advertir  la  luz  al  final  del  túnel,  por  los  estra-  de beber, 16 y en el desierto los alimentó
            gos que generó la Pandemia, que ha afectado             con maná, comida que los antepasados
            al mundo, con enfermos y muertos incontables            de ustedes no habían conocido, para hu-
            por el virus, pero que en nuestro caso debemos          millarlos y ponerlos a prueba, y para bien
            decir que Dios nos ha guardado providencial-            de ustedes al fin de cuentas. (NVI)
            mente, con salud física y económica, no po-
            dríamos dejar de lado ni reconocer que solo la      Y esta advertencia debe estar siempre presen-
            mano de Dios puede hacer esto. Así que debe-        te en nuestra mente y corazón: “no te llenes de
            mos cuidarnos de olvidar y comprometernos a         orgullo”, porque Dios nos levantó de una condi-
            seguir cumpliendo su propósito como univer-         ción de limitaciones no solo materiales, de ex-
            sidad, manteniendo nuestro testimonio y com-        periencias en el campo educativo, sino también
            partiendo las buenas nuevas de salvación.           de la opinión de muchos sectores que no po-
                                                                dían o no querían admitir que como evangélicos
               12 Y cuando hayas comido y te hayas sa-          tuviéramos la capacidad de lanzarnos a un pro-
               ciado, cuando hayas edificado casas có-          yecto de esta envergadura. Y Dios nos protegió
               modas y las habites, 13 cuando se hayan          del rechazo de la sociedad, de las acechanzas
               multiplicado tus ganados y tus rebaños,          de los adversarios, de “peligros en el camino”,
               y hayan aumentado  tu plata y tu oro y           que las hubo y muchos, como las dificultades
               sean abundantes tus riquezas,                    iniciales para que las instancias oficiales apro-
                                                                baran nuestros planes de estudio, la negativa
            Al  hacer este recuento, debemos admitir, que el    de parte de ciertas autoridades y sectores edu-
            Señor nos ha provisto de muchísimos recursos,       cativos a concedernos el acceso a los hospita-
            que contamos con edificios e infraestructuras       les para las prácticas de nuestros estudiantes,
            amplias, cómodas y funcionales, modernas ins-       la negatividad de algunas instituciones banca-
            talaciones, equipos y tecnologías, recursos hu-     rias a concedernos créditos, por tener dudas
            manos suficientes y plenamente identificados,       de la viabilidad de nuestro proyecto, de univer-
            que nuestros bienes se han “multiplicado” y que     sidades que propalaban información negativa
            aunque no nadamos en la abundancia, nuestra         de nuestra institución, para atraer hacia ellos a
            “plata y oro” si han aumentado, quizá más allá      nuestros estudiantes, etc.
            de nuestros mejores sueños y expectativas.
                                                                Pero Dios “sacó agua de la dura roca” y nos dio
                                                                de beber, nos alimentó con “maná”, para "QUE A
               Cuando  hayan comido  y  estén  satisfe-         FIN DE CUENTAS NOS FUERA BIEN” (NVI)
               chos,  y vivan en las  buenas casas  que
               hayan construido, 13 y vean que sus va-
               cas y  ovejas han aumentado, lo mismo                17 No se te ocurra pensar: “Esta riqueza
               que su oro y su plata y todas sus propie-            es fruto de mi poder y de la fuerza de mis
               dades, 14  no se  llenen de orgullo ni  se           manos”. 18  Recuerda  al  Señor tu  Dios,
                                                                    porque  es él quien  te da el poder  para
                                                                    producir esa riqueza…

                                                                                                               9
   6   7   8   9   10   11   12   13   14   15   16